lunes, 16 de junio de 2008

Conversaciones entre un hada y Dios I


-"Dejad que me marche, no me permitáis derramar mis súplicas,
pues ya sé que mi empresa hacia el desengaño navega;
mas es un viaje tan dulce que siempre durase quisiera"

-"Dulces labios, vuestro candor es innegable"

-"Si en un momento de delirio mis oídos susurrasen
un te quiero tan sincero que mi corazón apocase,
después de siglos de silencio a vos mi alma entregaría
y las estrellas y los ángeles de envidia llorarían"

-"¿Pues qué amor es más puro que el de tus ojos azulados,
qué poesía más eterna que la de tu papel gastado?"

-"Que la noche borrase el amor de mi corazón inclemente
pediría aun sabiendo que ello la muerte acarrearía.
Pues esta ponzoña que inunda mis sentidos no desaparecerá
con el tiempo o la distancia, sino que se extenderá
hasta ocupar mi espíritu y acabar con toda la razón
que todavía en mi mente perdura"

5 comentarios:

Pedro Estudillo dijo...

El amor cuando aparece, todo lo inunda y todo lo ensombrece... o ilumina, según se mire.
Me gustó leerte.
Besos.

ellohir dijo...

No he entendido una mierda.

Morgana dijo...

Qué sinceridad, Ellohir, aunque no sé que no has podido entender, pero bueno. Yo creo que el texto está claro.
Besitos a los dos.

ellohir dijo...

Es que no es una conversación. Ninguno presta atención a lo que dice el otro. No tiene sentido.

Anónimo dijo...

Hay un par de versos/conceptos que no entiendo. Pero me hago una idea del significado del conjunto.