
Adoro la sensación de tumbarme en cualquier parte con los brazos por encima de la cabeza con el sentimiento de que todo encaja.
Las nubes parecen comulgar en perfecta sincronía con tus pensamientos y esbozan dibujos de las emociones que te envuelven.
La música que escuchas no podría reflejar en mayor medida lo que te sucede.
A tu alrededor, los eventos, las personas, todos están relacionados e interconectados y conforme comulgas con tus ideas, ves que ellos también lo hacen con las suyas.
Amor, amigos, todo se une de forma perfecta y armónica, y me siento feliz. Feliz porque todo sale bien, porque tengo la suerte de ser amada por personas fantásticas, y, sobre todo, porque me siento en paz conmigo misma. Estoy en mi camino, y aunque me cueste diez horas de esfuerzo diario, constante, lo seguiré con tenacidad.